DESTIERRO

Te estuve esperando en la noche,
Mas no llegaste, tú sabrás por qué.
Creí habíamos quedado como amigos,
Ahora, si te digo, ya no sé.

Te empeñas en romper con un pasado
Que, siempre, aunque no quieras, llevarás
Grabado en lo más hondo de tu alma
Porque a nadie, como a mí, nunca amarás.

Lo sabes, no lo digo con orgullo,
Lo hago con toda mi humildad,
Te he pedido perdón hasta arrastrarme,
No sé si aún me queda dignidad.

Sólo me queda seguir, por ti, esperando,
Mis ojos, secos, ya no pueden llorar.
Quizá, si un día, tu amor aún despertase,
Es muy posible volviérame a encontrar.

Ya nada quiero, lo sabes tú muy bién,
Únicamente, no dejarte de amar.
Pero, si incluso, hasta eso te ofendiera,
Desterraré mi amor a otro lugar.

Greco

GARDENIA

Gardenia, flor de bolero,
Inspiradora de ensueños,
De aquelarres y de embrujos,
De amores locos, sin dueño.

Gardenia, tallo de espinas,
De blanca flor primorosa,
Pétalos lindos, de ninfa,
Tu fragancia te hace hermosa.

Quiero pensar en tus ojos,
Si ojos tener pudieras,
Luceros de media noche
Que, tras la luna, escondieran.

Cómo sería tu boca,
Cómo tu amor, si pudieras?
Gardenia, flor caprichosa,
Enamorarte quisiera.

Puede que sí, que esté loco,
Prendado de tu hermosura,
Pero, si es así, gardenia,
Bendita sea esta locura.
Greco

SIN HORIZONTE

Qué hermosa andadura por la playa,
Soñando con un mar sin horizonte,
Buscando a lo lejos, sin cesar,
Un velero que el temporal afronte.

Te invita a pasear entre sus olas,
Oirás sonar hermosas caracolas.
Es el mar que te llama sin descanso,
Son las algas que te llaman, que están solas.

Que quieren que las beses quedamente,
Que despidas los vientos que te azotan,
Que acaricies la espuma de sus crestas,
Que quieren los aromas que, en ti, brotan.

Te quieren seducir con sus sirenas
Vestidas de estrellas plateadas,
Luciendo, radiantes, su hermosura,
Dejándote preso en su mirada.

No dejes que tu alma en ellas quede.
Evita que sus ojos en ti prendan.
Es fácil que no puedas escaparte,
Que tus ansias de ser libre no comprendan.

Greco

PRIMAVERA

Qué alegre llegaste, primavera,
Trayéndome la flor más deseada,
Los besos, la sonrisa de mi amada,
El aroma de sus pasos a mi vera.

Has llegado a hora muy temprana.
He sentido que todo ha cambiado.
Hoy he visto que, estando tú a mi lado,
Has llenado, por completo, mi mañana.

A vivir, he aprendido con tu amor.
A soñar, con tus ojos aprendí.
Desde el día en que yo te conocí,
Has borrado de mi alma el dolor.

Puesto que ahora he de vivir con tu presencia,
Lograré que te veas arropada,
Que te sientas, como nunca, bien amada
Y que riegues mi camino con tu esencia.

Conseguí lo que siempre he deseado,
Que llegases, de mi alma, hasta la puerta
Y que al ver que, para ti, estaba entreabierta,
Decidieras quedarte ya a mi lado.
Greco

VIEJO TRONCO

Hoy vengo a sentarme a tu sombra,
Viejo tronco que guardas mis recuerdos.
Confidente de penas y alegrías,
Amigo incondicional en mis momentos.

Hoy vengo a recordar aquellos días
En los que, bajo tus ramas, hice un juramente.
Palabras, palabras, sólo palabras,
Como frágiles hojas, las llevó el viento.

Pasando por la historia de mi vida,
Cuánto tiempo pasado he perdido!
De nada sirve, ahora, lamentarse,
Ese tiempo, para siempre, ya se ha ido.

Y cómo deseché viejos amores
Que, a mi puerta, llamaron presurosos.
Unos eran mendaces, eso es cierto,
Pero también los hubo muy hermosos.

Por eso, viejo tronco, a ti vengo
A darte cuenta del fin de mi camino.
Mis pies están cansados de vagar,
Ya creo que han llegado a su destino.
Greco

MUÑECA

Hoy estoy triste,
Han matado a una muñeca.
Sus bracitos, rotos, por la calle,
En su bonita cara, una mueca.

Cómo se puede matar a una muñeca?
Cuánta ilusión y alegrías habrá dado!
Ahora, sus piezas, chatarra inservible,
Recuerdos de un pasado.

Dónde estará la niña que algún día,
Contigo, muñeca, habrá jugado?
Es posible que, pasado el tiempo,
También ella haya acabado.

Hoy ha muerto una muñeca.
Retazos de una vida se ha llevado.
Querida y mimada en otro tiempo,
Dime, quién te ha destrozado?

Es posible que, al verte despreciada,
También hayas llorado.
Ahora ya es tarde, si te hubiera conocido,
Quizá te hubiese amado.
Greco

CARACOLAS

Cuando opienso en ti,
No lo sé, siempre pienso en caracolas.
Veo una sonrisa limpia,
Unos ojos que bailan con las olas.

Cuando te he mirado,
Te he visto surgir entre la espuma.
Quizá entre dulces ovas,
Fuiste mecida en tu cuna.

Cuando te he besado,
Mis labios, otrora temblorosos,
Han quedado fundidos en los tuyos,
Tan preciosos...

Cuando te he amado,
Que tu cuerpo levitaba he sentido.
El ardor de tu ser
En mi alma, como yesca, ha prendido.

Cuando, a mi lado, has despertado,
Que en el cielo estaba he creído.
Que nunca de mi vera marcharías,
Besando tus ojos, he sabido.
Greco

CON MARIPOSAS

Hoy he vuelto a soñar con mariposas,

Sabiéndome abrigado entre tus brazos.

He acariciado cada poro de tu cuerpo,

Bebiendo tan solo tus amores.

Hoy he visto que todo lo pasado

No ha mermado, para nada tu cariño,

Que el fuego que un día alimentamos,

Se ha avivado, cargado de esperanza.

Ya no sé si la fuerza de tu aroma

Ha podido con la noche más perversa,

En la que, loco y triste, he caminado,

En busca de tu sol que era perdido.

No me apartes más nunca de tu lado

Déjame que te siga en tus andares.

Apartaré la maleza de tus pies,

Velaré tu sueño y te besaré en silencio.

Greco

CAE LA NIEVE

Me asomo a la ventana de mi vida.
Cae la nieve queda, mansa, pura.
Quiero cogerla, pero se me escapa,
Tiene celos, quizá de tu hermosura.

El frío atenaza mis sentidos.
Necesito un poquito de calor.
Hoy, no encuentro dónde refugiarme,
Tendré que guarecerme en tu amor.

Cae un manto de armiño en tu mirada,
Cubriendo, de tus ojos, el color.
Pero sé que, debajo, reverberan
Con la fuerza y la belleza de una flor.

Esa flor que has tenido bien guardada,
Pues sabías que llegaría yo.
No me niegues ahora que la coja,
Fuí, sin duda, el primero que llegó.

Y, si crees que no la tengo merecida,
Déjame que pasee mi dolor,
Gritando, por doquier, que me has dejado,
Que, de tu amor, nunca fuí merecedor.

Greco

GARZA

Garza que anidas en mi estanque.

Enredadera abrazada a mi alma.

Amapola que alegras mi existencia.

Brisa que me rodeas, trayéndome la calma.

Bálsamo que relajas mis impulsos

Cuando todo me parece sin sentido.

Luz que me guía en la tiniebla

Cuando,en ella, equivocado, me he perdido.

Ungüento que calmas mi dolor

Si de locos avatares salgo herido.

Aroma que embargó mi corazón

Una vez de que te amaba, he sabido.

Ya no quiero que retornes a la nada,

No me ves cómo estoy de dolorido?

Pues, mirándote a los ojos, he pensado

Que eres tú lo que nunca había tenido.

Es posible que mi hora sea acabada,

Que todo tu cariño se haya ido.

Es seguro que siempre me arrepienta

De haberte tenido y perdido.

Greco

OJOS TRISTES

He visto unos ojos amorosos

Que mostraban su falta de alegría.

A acariciarlos probé, no podía,

Hube de abandonarlos, tan preciosos...

Han quedado muy tristes y llorosos

Pidiendo ayuda que darles quería.

Mas no sirvió mi pertinaz porfía,

Tornáronse humildes y borrosos.

De repente, he prorrumpido en llanto,

Al ver, de todo esfuerzo, mi impotencia.

Roto quedé, qué duro desencanto,

Al ver escapárse de mí tu esencia.

Del lado de la muerte me decanto,

No veo necesaria mi presencia.

Greco

AMOR ROTO

He querido, mi amor, besar tu boca

Cuando estábamos solos en la playa,

Sabiendo que tú, al fin, cuando yo vaya,

Buscarás otros besos como loca.

Yo no creo que sea cosa poca

El saber dónde tu cariño raya,

Y es que pienso que, cuando me ido haya,

No me serás tan fiel como una roca.

Que me esperes, no veo cosa fácil.

El amor, como todo, ha caducado.

Hay que ser, en el disimulo ágil,

Para ocultar que todo haya acabado.

Que aquel amor que era un juguete frágil,

En manos burdas, ha finiquitado.

Greco

FRÍO

Vuelve a crepitar el vivo fuego

En la lumbre baja del deseo.

Hace tiempo que, en sus llamas, sólo veo

Lo que pudo ser amor y acabó en juego.

Micabaña, ahora, siente el frío,

Huérfana de todo aquel pasado,

Del que solo, en mí, tus ojos han quedado,

Apesar de lo mucho te he querido.

Recuerdas esos guiños de la luna

Que alegraban nuestras noches de amor puro?

Por entonces, que te amaba era seguro

Que te amaba como nunca amé a ninguna.

Hoy la luna ya no tiene esa color.

Llora, triste, el amor que hemos perdido.

Fue testigo de lo bien que te he querido

Y lo es hoy de nuestro loco desamor.

En el fuego, tu rescoldo se ha apagado.

Vino el viento y las cenizas se llevó.

Cerré la puerta, ya todo se acabó.

Ni las huellas de tus pasos han quedado.

Greco

SIRENA

Sé que saliste del mar

Y volver al mar no quieres.

Andas jugando en la playa,

Buscando nuevos quereres.

Sé que anduviste en la espuma,

Entre estrellas y corales,

Que susurraste a los vientos

Muy seductores cantares.

Sentado en el arrecife,

Pensando en nuevos andares,

Me han salpicado las olas

De tus nuevos avatares.

Qué bella y grácil te veo.

Qué frescura en tu mirada.

Qué lindos esos ojitos

De sirena enamorada..

Las olas te llevarán

En busca de nuevos mares.

Yo te seguiré soñando,

Me arrullarán tus cantares.

Greco

NENÚFAR

Has salido, cual nenúfar olvidado,

De una charca, otrora bello estanque,

Consiguiendo que, de mi alma, arranque

El rencor que, en ella, había, al fin, guardado.

Has llegado, cual rayo lujurioso,

A remover mis sentidos más secretos,

Dejándolos, de tu imagen, bien repletos,

Sumidos en un baile licencioso.

Oh!, tu aroma, tu caminar, qué hermoso!

Te dejas llevar, cual ninfa loca,

Exhalando mil amores por tu boca,

Haciendo mi retorno doloroso.

Y es que, sabes, has dejado en mí tal poso

Que, si fueras flor, te cortaría

Para llevarte conmigo a mi alquería

Y admirar siempre un talle tan gracioso.

Desgraciado de mí, qué venturoso

Si estrecharte entre mis brazos yo pudiera...

Mas no quiero, nunca más, mi amor te hiera,

Tu corazón bien merece de un reposo.

Greco

PUEBLOS DEL MUNDO

Quisiera hacer un puente de alegría
Que uniera continentes y naciones.
Por bandera, un ramillete de poesías,
Por escudo, un haz de corazones.


Quisiera conoceros por vuestra alma,
No por religiones o colores.
Quisiera que cantáramos unidos,
Al sol, cada mañana, en sus albores.

Si pudiera pintar un arco iris,
En él, refundiría la nobleza
De otros pueblos amigos y olvidados,
Paradigma de color y de belleza.

No deseo que existan las fronteras
Que dividen, extorsionan y envilecen,
Que mancillan los derechos más humanos
De esos seres que, cruzándolas, perecen.

Quisiera, para todos, la igualdad,
Merecida por haber nacido humanos.
Que anduviésemos, por siempre, en esta vida,
El camino, unidas nuestras manos.

Greco

TU ESENCIA

Cuántas noches pasadas a tu lado

Sin dejar que notaras mi presencia.

Cuántas veces, a tu lado, he pasado

Percibiendo el aroma de tu esencia.

Y es que sigo teniéndote querencia

Apesar de saber me has olvidado.

Pero todo el cariño que me has dado

He sabido administrarlo en tu ausencia.

Ya no pienso obtener benevolencia

De quien sólo mi ceguera ha golpeado.

No hay motivo más absurdo de violencia

Que pagar con desdén un amor dado.

Ahora solo quiero verte paseando

Por un cielo en el que solo haya una estrella.

Quiero ver como el sol se va apagando,

Para que tú, cada vez, luzcas más bella.

Soñarte saliendo de tu mar,

Encarnación de mítica sirena,

Loca por poder dejarte amar

Hasta quedar, de mi cariño, llena.

Greco

HIJO DE ESPARTO

No finjas,

Eres hijo del esparto.

Siempre en alpargatas,

Sobre cantos rodados.

Te sientes dolido,

Pero, sabes?

Nunca harto.

Eres hijo del esparto,

De donde no había caldo,

No había cuchara,

Donde vivir era un parto.

De esparto viejo,

De parva y tomiza,

Ya lo sabes, seguro!

Pero, pensando lo que eres,

Quieres seguir vivo.

Eres hijo de hambruna,

De esparto,

Huérfano de sol,

Quizá dolido,

Indomable,

Nunca harto.

Greco

AVECILLA

Paseando por un camino,

He encontrado una avecilla

Que, apostada en una orilla,

Su amor me vino a cantar.

La vi triste y desolada

Porque cuenta que un azor

Ha marchado hacia otros mundos,

Después de darle su amor.

Que, confiada y sin dudas,

A él sólo se entregó

Y la forma de pagarle

Es que sola la dejó.

No llores más, avecilla,

Que otro azor a ti vendrá,

Con amores renacidos

Que a tu corazón traerá.

Yo no quiero de otro azor,

palabras ni sentimientos,

Que todos mis pensamientos

Se tornaron en dolor.

Greco

DESTINO

Se puede, amor, amar de tal manera

Que, pasando el tiempo allá, en la nada,

Se pretenda seguir enamorados

Tan solo de un albur, de una quimera?

Es ser loco adentrarse en un desierto,

Desnudo de envidias y ambiciones,

Soportando penurias y tristezas,

Por un amor que puede ser incierto?

Es justo que el mundo me condene

A amarte, tan solo, en la distancia,

Perdiéndome tus risas y tus besos,

Obligándome a olvidar aunque me pene?

Me pierdo en un camino que no he andado,

Me ahogo con hieles no bebidas,

Me asfixio con aires indeseados,

Me arrastro entre cuerpos que no he amado.

Ahora sólo nos queda un camino,

Romper con las amarras que nos atan,

Subir al tren que solo una vez pasa,

O afrontar, en soledad, nuestro destino.

Greco

AÑORANZA

Miel que se pierde entre tus ojos,

Dándoles el dulzor de las estrellas.

Olores que enamoran en la noche,

Haciendo tus caricias aún más bellas.

Amanecer que despierta entre tus labios,

Haciendo renacer vieja esperanza.

Torrente de luz que te rodea,

Deseo de un amor que no te alcanza.

Manos que acarician con ternura

En momentos de alegría y de tristeza,

Cargadas de cariño y añoranza,

Lejanas de la mínima dureza.

Así te veo en noches de locura,

Pensando en los momentos no pasados,

Perdidos en la oscuridad del tiempo

Y, pena, nunca más recuperados.

Quizá no volvamos a encontrarnos.

Quizá, cuando vuelva, te hayas ido.

Posible es que nunca recuperes

Recuerdos que, en el tiempo, han vencido.

Greco

DESPERTAR TU CORAZON

No quiero despertar tu corazón

Del sueño que lo tiene adormecido.

Reposando en tus antojos ha quedado,

Simplemente porque tú así lo has querido.

No quiero que lo obligues a quererme,

Para qué, si tú no lo deseas?

Es mejor que lo guardes para otros

Que más cerca de tu amor tú creas.

Es absurdo querer un imposible,

Vivir un sentimiento que te engaña,

Destrozar una vida para siempre,

Albergando un amor que tu alma araña.

No quiero despertar tu corazón,

Déjalo que duerma confiado,

Que sueñe con amores de quimera,

Que piense que el amor ya lo ha encontrado.

Y, si un día, despierta dolorido,

Porque el fuego de ese amor ya se ha apagado,

Que no sufra por algo tan frecuente,

Solo piense en el tiempo disfrutado.

Greco

HILANDERA (nana)

Hilandera que hilvanas

Hilos de oro,

Hila un tupido velo

Para un tesoro

Que lo tengo guardado

Entre mil lunas,

Dormidito y callado

En la su cuna.

No quiero que un mal aire

Me lo despierte,

Solo quiero arrullarlo

Hasta mi muerte.

Hilandera que tejes

Hilos de seda,

Hazle una camisita,

Cubrirlo pueda.

Al run, run, mi niño,

Duerme y no llores,

Mira que mi amor vela,

Sueña mil soles.

Greco

SOY NADA

Entre la bruma y la niebla,

Duerme aquel beso,

Descarnado y sincero

Recuerdas?

Fue puro artificio

Que explotó en tus entrañas

Abrasando quereres,

Lo dudas?

Ahora, qué queda?

Tan solo cenizas,

Ni siquiera rescoldo,

Frío.

Entre muecas y llanto,

Te vislumbro en la sombra.

Nada más puedo darte,

Soy nada.

Como un viento sin nombre,

Pasé por tu vida.

He secado tus flores,

He sido una herida.

Greco

FUENTE VIEJA

Hoy ha dejado de manar

La fuente de mi aldea.

Ha callado el vencejo.

Ha secado la flor.

Hoy ha vuelto a llorar

Aquella moza linda

Que, plena de gracejo,

Allí dejó su amor.

Su quedo suspirar

Ha conmovido mi alma,

La ha transportado lejos,

Borrado su color.

Qué solo va a quedar

Mi pobre niña hermosa,

Forrada en oro viejo,

Con olor a alcanfor.

No volverá a encontrar

El agua cristalina,

El canto del vencejo,

El verdadero amor.

Greco

PINO Y RESINA

Te he dicho alguna vez

Que me hueles a hierba,

A temporal,

A pino y a resina,

A romero?

Entras por mi ventana,

Luz primera,

Llenando mi mundo de alegría,

De suaves trinos,

De prado verde,

De esquirlas cantarinas.

Besas mi pan

Y llenas mi zurrón con tu cariño.

Bajo una sabina te contemplo,

Abierta al amor,

Al aire fresco.

Qué bien te respiro,

Explorando los caminos de tu cuerpo,

Llegando hasta tus labios,

Quedando en ellos!

Greco